martes, 31 de mayo de 2016

3 cosas que ni Keiko ni PPK están diciendo en sus Campañas

Ambos candidatos están hablando mucho, pero hay 3 cosas de importancia capital que ni Keiko ni PPK están diciendo en sus campañas, y son tan importantes que si no las tomamos en cuenta seguiremos siendo un país pobre por mucho tiempo:

1.- Qué hacer para equilibrar el nivel de vida de Lima y provincias y porqué debería importarnos


Es posible que en Lima esto no nos importe, pero debería. ¿Sabías que un ingeniero puede ganar en Lima en promedio 4 veces más que en provincias? Naturalmente esto lleva a que los ingenieros (y otros profesionales) se vengan de provincias a Lima dejando a sus provincias sin sus mejores cuadros profesionales. Eso lleva a un empobrecimiento de las provincias que origina una mayor migración, no ya de profesionales, sino de todo tipo de gente hacia Lima. Luego tenemos  sobrepoblación de la capital peruana, problemas sociales y empobrecimiento general. Además de una violencia endémica y odios no resueltos.

Hay una cuestión elemental que ni siquiera se plantea en Lima ¿Por qué en nuestro país los sueldos son tan desiguales entre Lima y provincias? Es que es increíble que esa pregunta no tenga respuesta, ni siquiera se formule y menos se responda. Si esa situación no cambia, el país jamás despegará, porque las regiones se empobrecen año  tras año, y esto lleva a conflictos sociales que cuestan un dinero y retrasan inversiones a veces millonarias. Además esa disparidad en el desarrollo entre Lima y las provincias es una situación completamente injusta, porque se supone que los peruanos ante la ley, y las oportunidades, somos todos iguales. Pero si nacer en Lima te da opciones que en provincias no pueden ni soñarse, entonces ¿qué? Ni PPK ni Keiko Fujimori, nos han dicho qué hacer para equiparar el nivel de vida de Lima y las provincias. Ni en sus sueños esto les preocupa.

PPK-y-keiko-fujimori
Candidatos olvidaron temas importantes en campaña

2.- Qué hacer para tener una educación de calidad aprendiendo de los mejores

Todo mundo, incluídos PPK y Keiko dicen que les importa la educación y que hay que mejorarla. Lo que no nos dicen es cómo. La violencia que hoy se vive en las ciudades del país es también producto de esa mala educación que se ha recibido por años en nuestras escuelas.

Hace algunos años estuve vinculado a una organización educativa de altos estándares, que anticipándose al futuro, querían mejorar aún más la calidad de sus profesores y alumnos. Para lograr ese objetivo trajeron profesores de Cuba. Como sabemos esa isla es conocida por el alto nivel educativo que brinda. Pues la institución que menciono se quitó las anteojeras ideológicas y de la mano de estos profesores cubanos elevó aún más su ya elevado nivel educativo. Estamos hablando del grupo de escuelas y  academias PAMER.

Si esa iniciativa los peruanos la replicáramos trayendo a nuestras escuelas y colegios, profesionales de la educación de los países de más alto nivel educativo, dejaran la huella de su saber, ganaríamos mucho, obtendríamos las semillas de una educación de gran calidad. Bien decía Miguel Angel Cornejo “¿De quién quieres aprender a jugar tenis, del más bruto del tenis o del mejor?”. En educación es igual. Traer profesores de Finlandia, de Cuba, de Japón, de Alemania, por convenios y por temporadas, es una experiencia que enriquecería profundamente nuestra educación y nos llevaría a dar un salto cualitativo en ella. Pero ni PPK ni Keiko están diciendo algo parecido a esto. Después de las elecciones entrarán en la rutina y se olvidarán de la educación para hacer lo de siempre y que nada cambie. Ni en sus sueños esto les preocupa.

3.- La Tecnología se fue de paseo para Keiko y PPK


En ninguna intervención los candidatos han mencionado lo que piensan hacer para estimular el desarrollo de la tecnología en el país. ¿Cuál es la importancia de la tecnología? Es tan simple que explicarlo paltea. En simple, somos un país exportador de piedras e importador de tecnología. Por las piedras nos pagan uno, por la tecnología que compramos pagamos cien. Exportamos gas en estado natural y nos lo venden con el precio multiplicado varias veces incorporando tecnología. Lo mismo nos pasa con la madera que nos compra Chile a precio de uno, como materia prima; y nos lo revende a precio de cien, incorporándole tecnología. ¿Han dicho algo los candidatos para desarrollar la tecnología en el Perú? Nada, silencio por todos lados. Festival, baile y promesas: la tecnología se fue a paseo. Es lo que tenemos, dos candidatos en campaña en el tercer mundo. No esperemos que se iluminen de pronto. Seguiremos esperando que algún día los temas importantes  sean puestos sobre la mesa y deberemos ser los ciudadanos los que elevemos el nivel del debate y las propuestas.

San Isidro, 31 de mayo del 2016


jueves, 12 de mayo de 2016

3 Razones de Por qué perdieron Alan García, Toledo y Barnechea que no imaginas


Alan, Toledo, Alfredo Barnechea. Todos ellos perdieron en la primera vuelta electoral de las presidenciales del 2016 frente a un gringo que apenas habla bien el castellano y una japonesa que tiene el mismo problema, pero que además carga una mochila “pesada” que ellos debieron usar de lastre para hundirla en lo más hondo de algún desierto electoral. Pero perdieron ¿Qué pasó? ¿Se les pasó el tren? La respuesta es sencilla, pero no por eso fácil de explicar.

Primera razón: factor Tiempo


La campaña de 1985 Alan García la empezó un año antes, y era conocido desde 1982 como el joven, inteligente y carismático líder del APRA. Llegadas las elecciones sacó el 47% de los votos, obligando con ello a la renuncia de Alfonso Barrantes a la segunda vuelta, pues había sacado 21% de votos y no se jugaba nada. En el 2000 Alejandro Toledo ya tenía encima una campaña (1995), pero sobretodo la campaña previa a la presidencial del 2000, enfrentándose a la dictadura. No ganó el 2000 (o le hicieron fraude), pero el 2001 la gente lo ungió presidente. Había estado pues en escena, durante más de un año. Alfredo Barnechea no ha tenido nunca una campaña previa a nada, a no ser por la alcaldía en el lejano 1983. Perdió.

¿Entonces? Entonces en lugar de hacer campaña, los ex presidentes (y otros) se aburguesaron y perdieron el tiempo. Toledo se fue a vivir en el extranjero y Alan vivió cómodamente en…Vaya a saber dónde, tiene varias propiedades, pero ninguna es en nuestra selva o nuestra sierra. Lo que quiero decir, ambos viven a cuerpo de rey y no se ensucian los zapatos si no hay campaña electoral. Una especie de rollo “vota por mí aunque yo no vivo como tú (tu pobreza)”. Obvio que la gente no se traga ese rollo. Los castiga, la gente  no se chupa el dedo.

Ex presidentes: las vieron negras en las elecciones 2016

Segunda razón: factor Trabajar para el enemigo


Ambos ex presidentes permitieron que se les achicharre en la hoguera. Porque, ¿quién puede creer que es bueno indultar a miles (o cientos) de narcos? Sólo a Alan se le ocurre eso. Y a Toledo, lo del escándalo no muy bien aclarado de Ecoteva, le estalló en el rostro. Sus explicaciones de que su suegra, que Maisman, que el holocausto, sólo contribuyeron a echar sombras sobre él. Además, la imagen de Toledo ya había sido pulverizada en la anterior elección (2011) y aún durante su gobierno. Ambos, Toledo y Alana eran pues, una perita en dulce. Nunca levantaron cabeza.

Alfredo Barnechea tuvo en el 2016 una subida que dura lo que las mariposas en el estómago en un primer amor: nada. Cuando se abren los ojos se mira todo y no hay tu tía. A Alfredo lo tumbaron un gorro y un chicharrón. No ponerse un gorro a manera de disfraz, y no comerse un chicharrón que no quería, es válido. Nunca lo hicieron Belaunde, Bedoya o Haya. Pero estos son otros tiempos y esa jugada  (el disfraz) la inventó Alberto Fujimori para acercarse a quienes le eran tan diferentes. Alfredo pudo decir que no, que no se disfraza, que no es un falso, pero eso se hace con tiempo y explicando una vez y otra hasta que quede muy clarito porqué no haces “esas” cosas. No se hace de pronto y a la diabla.  

Tercera razón: factor Caídos del palto


Fue un error no confrontar a la Fujimori. Jamás la atacaron, nunca le dijeron sus verdades, la dejaron crecer como la mala yerba. Todos la querían para la segunda vuelta. Olvidaron que antes hay que llegar a ella. Y Keiko sonreía, suavecita, indemne, casi virginal. Mientras los ex presidentes y otros candidatos no la tocaban, a través de las redes sociales y de muy elaborados memes, con imágenes y leyendas que los pintaban de ladrones, la Fujimori deslizaba la idea de la corrupción fijándola en sus contendientes. El gobierno más corrupto de nuestra historia pintaba de corruptos a sus adversarios y éstos ni piaban.
Por cierto, la campaña de Keiko duró cuatro años, frente a los 3 meses de sus contendientes. Hacer campaña es ensuciarse los zapatos. Es entregar tiempo y estar con la gente. Es conocer el país no por la memoria, sino por vivencias frescas y por comprender las cosas desde dentro. Hacer campaña es no dejar al adversario con vida (en el 2000 se debió vacunar al fujimorismo sacándolo de la ley) para que se levante. Nada de eso hicieron los ex presidentes y tampoco lo hizo Alfredo Barnechea. Podrá PPK vencer a la Fujimori? Lo sabremos en muy poco tiempo. Lo cierto es que gane él o ella, al Perú le espera un futuro incierto dirigido por los menos capaces de llevar el barco a buen puerto.

Lima, 10 de mayo del 2016.  

martes, 3 de mayo de 2016

¿Quién ganó las elecciones si medimos Cuánto cuesta un voto?

No vamos a inventar la pólvora ni restar méritos a quienes los tienen. Pero tampoco vamos a soplarnos la explicación de los candidatos naturales, trabajadores  y exitosos. En política, como todo en la vida, los votos cuestan. Es cierto que no toda suma añade votantes; ni toda alianza incrementa caudales: los chamuscaditos Alan y Lourdes son la mejor prueba de ello. Ni toda la plata como cancha del mundo compra una presidencia o genera un buen currículum. Es verdad todo aquello. Pero también lo es que sin plata no hay campaña, ni hay mítines posibles, ni viajes, ni avisos en diarios, radio, ni mucho menos en TV. Ni siquiera hay redes sociales.


Recursos inagotables y 4 años en campaña
Sin plata, y digamos la verdad, sin tiempo. Porque una cosa es tener todo el tiempo del mundo, o cuatro años para hacer campaña, mientras otros, como la Vero, tienen que trabajar; o como el Goyo Santos, no tienen tiempo porque los tienen presos. Por eso cuando nos quieren vender a una Keiko Fujimori como una líder política de polendas, nosotros sonreímos, nos encogemos de hombros y decimos, Sí, claro, cómo no.

Haciendo Números


Según la ONPE, el partido de Keiko Fujimori ha recibido donaciones para su campaña por un monto de 12’704,578 soles. Si sumamos la versión de que sus parlamentarios le pagan a Keiko un sueldo de 10,000 soles mensuales, tenemos que en los cuatro años de campaña la señora Fujimori ha gastado 480,000 soles adicionales. El nuevo total es 13’184,578. Keiko sacó 6’112,084 votos, por lo que decimos que a la señora Fujimori su votación le ha tomado 4 años y 2.16 soles por persona. Parece poco, ¿verdad?

Pues bien, el Frente Amplio de Verónica Mendoza, recibió aportes por 220,776 soles. La campaña del FA ha durado tres meses que valorizados por el sueldo de parlamentaria de Verónica (15,000 soles) suman 45,000 soles adicionales. Esto hace un nuevo total de 265,776 soles. Verónica Mendoza ha obtenido 2’874,113 votos. El valor que ha costado obtener cada voto a Verónica Mendoza es 0.092 soles. Poco menos de 10 céntimos por voto y 3 meses de tiempo. Digamos, la performance de Verónica es bastante mejor, 20 veces mejor que la de la señora Keiko Fujimori.

El partido Democracia Directa del Goyo Santos ha recibido aportes por 13,020 soles y teniendo a su líder preso ha obtenido 613,115 votos. El costo es de 0.021 soles de inversión por cada votante. A Democracia Directa cada voto le ha costado 100 veces menos que Keiko Fujimori y no ha gastado tiempo en ello. Como vemos, cuando hacemos números, el triunfo de Keiko Fujimori, siéndolo, resulta bastante caro.

¿Ganó Keiko?


 La campaña de Keiko Fujimori ha sido la más larga que se recuerde en la política peruana. Ha durado más de cuatro años y abarcó todo el territorio nacional. Ha incluido entrega de dádivas como cancha, de todas las formas y con recursos al parecer inagotables. Sin embargo a la señora Keiko Fujimori cada voto le cuesta veinte veces más que al Frente Amplio y cien veces más que a Democracia Directa. ¿Ganó Keiko? Sí, tiene más votos que todos. Pero desde una óptica empresarial Keiko no es una buena inversora, o no es una buena inversión, o ella misma es un mal producto. Ganó en votos, pero a un precio muy alto. Esperemos que no gane las elecciones y que no ganando además se convierta en la candidata más cara por votante en nuestra historia.

Nota: en esta relación no estamos considerando todo el dinero gastado por la Fujimori durante esos cuatro años de campaña en cuanto a dádivas repartidas en cada ciudad y pueblo que visitó, lo que incrementaría su costo por voto.

San Isidro, 03 de mayo del 2016.